¿POR QUÉ VENEZUELA SE RETIRA DE LA
COMISIÓN INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS?
El 28 de julio de
2012, el presidente Hugo Chávez hizo partícipe de su decisión de retirarse de
la Comisión Interamericana de los derechos humanos, tras el fallo que condena a
Venezuela por malos tratos a un detenido sancionado por terrorismo y que se
fugó a Estados Unidos. Caracas denuncia un veredicto político.
El 24 de julio de
2012, la Corte Interamericana de Derechos Humanos hizo pública su decisión de
condenar al Estado venezolano por ser internacionalmente responsable de la violación del derecho a la
integridad personal y por los tratos inhumanos
y degradantes en perjuicio del señor Raúl José Díaz Peña. La instancia juzgó que su detención
habría sido ilegal y arbitraria y habría estado sometido a un régimen de
detención preventiva que habría sobrepasado los límites establecidos en la ley penal, invocando una presunción de peligro de fuga. La CIDH también condenó al Estado
venezolana a indemnizar a Díaz Peña con 15.000 dólares.
¿Quién es Raúl José Díaz Peña?
Raúl José Díaz Peña
es un prófugo venezolano de la justicia severamente sancionado por los
tribunales por terrorismo y refugiado en Estados Unidos. En 2003, Venezuela
vivía una situación de polarización política extrema tras el golpe de Estado
abortado contra el presidente democráticamente elegido Hugo Chávez y el
sabotaje petrolero que costó a la economía venezolana la suma de 10.000
millones de dólares. Ambos fueron organizados por la oposición con el apoyo
explícito de Estados Unidos que había reconocido a la junta golpista de Pedro
Carmona Estanga, entonces presidente de Fedecámaras organización que agrupa los intereses
económicos del país y actualmente refugiado en Colombia.
El 25 de febrero de
2003, una facción radical de la oposición compuesta por Felipe Rodríguez, José
Colina Pulido, Germán Varela López, Silvio Mérida y Raúl José Díaz Peña,
decidida a derrocar a Hugo Chávez, colocó varias bombas en el Consulado General
de la República de Colombia y en la Embajada de España. El objetivo era acusar
de los atentados terroristas a los partidarios del presidente venezolano, los cuales
habrían actuado en represalia por la decisión de Bogotá y de Madrid de
reconocer a la efímera junta golpista de abril de 2002.
No obstante el plan
fracasó, pues las autoridades del país arrestaron a Díaz Peña y a sus cómplices
ese mismo día. Tras su juicio, el 29 de abril de 2008, la justicia venezolana
lo condenó en primera instancia a 9 años y 4 meses de cárcel por terrorismo. En
mayo de 2012, un juez decidió conceder un régimen de semi-libertad a Díaz Peña
y le permitió pasar los fines de semana con su familia y ejercer una actividad
profesional. En septiembre de 2010, Díaz Peña huyó y se refugió en Estados
Unidos.
¿La CIDH, una jurisdicción independiente?
Órgano jurídico de
la Organización de Estados Americanos, entidad bajo fuerte influencia de
Estados Unidos hasta el punto de
que los países de América Latina y el Caribe decidieron crear la Comunidad de
Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) en diciembre de 2011 con el fin de
emanciparse de la sombra tutelar de Washington y de su fiel aliado canadiense, la CIDH es sospechosa de parcialidad hacia los gobiernos de
izquierda en América Latina.
Así, contra todo
pronóstico, a partir de 2005 la CIDH aceptó estudiar el caso de Díaz Peña a
petición de la Venezuela Awareness Foundation, una organización de la oposición
a Hugo Chávez. Ahora bien, para poder analizar un asunto, los estatutos de la
entidad interamericana estipulan que se deben agotar primero todos los recursos
jurídicos del país de origen, lo que no es el caso para Díaz Peña. Es la
primera vez en la historia de la justicia interamericana que la CIDH acepta
estudiar el caso de un individuo condenado por terrorismo en su propio país,
prófugo de justicia y cuyo juicio sigue abierto, en violación de su propia
Convención. Hasta hoy, la CIDH no ha dado explicaciones al respecto.
Nicolás Maduro,
canciller venezolano, expresó su consternación y anunció que su país se
retiraría de la organización. Es
lamentable haber tenido que dar este paso, pero Venezuela se ha visto obligada,
dadas las decisiones aberrantes y
abusivas que se han tomado contra nuestro país durante 10 años. Ningún país de
Europa ni Estados Unidos aceptarían que la CIDH protegiera a un terrorista, declaró. La diplomacia venezolana acusa
a la entidad de complicidad con la
política de Washington de protección a los terroristas y exigió que apliquen los principios de
universalidad, imparcialidad, objetividad y no selectividad en el examen de las
cuestiones de derechos humanos.
En efecto, desde la
llegada de Hugo Chávez al poder en 1999, la CIDH multiplicó las decisiones e
informes desfavorables a Venezuela, en proporciones ampliamente superiores al
resto de América Latina. Así, desde su creación en 1959 y hasta la llegada de
Hugo Chávez al poder en 1999, la CIDH sólo emitió cinco decisiones condenando
las violaciones de los derechos humanos en Venezuela. En cambio, entre 2000 y
2012, la CIDH condenó a Caracas 36 veces. Así, en el espacio de 12 años, la
CIDH condenó a Venezuela 7 veces más que durante los 40 años anteriores, marcados
por exacciones de todo tipo y particularmente el Caracazo del 27 y 28 de
febrero de 1989, sublevación popular contra la vida cara, que el ejército y la
policía reprimieron en sangre, dejando un saldo de 3.000 civiles asesinados.
Por otra parte, durante
el golpe de Estado de 2002, la CIDH, como Estados Unidos, reconoció
abiertamente a la dictadura de Pedro Carmona en una carta que Santiago Antón,
entonces secretario de la CIDH, dirigió a ése. Maduro no dejó de recordar este
episodio que arroja una sombra sobre la credibilidad y la fama de la entidad
interamericana: La Comisión reconoció a los golpistas y negó el apoyo al
presidente Hugo Chávez.
El presidente Chávez confirmó que su país se retiraría
de la CIDH.
Venezuela se retira de la Corte Interamericana
de Derechos Humanos por dignidad y la acusamos ante el mundo de ser indigna de
llevar ese nombre de derechos humanos apoyando al terrorismo, subrayó. La CIDH
ni siquiera nos llamó para consultarnos. Aquí hubo un juicio, una condena, hay testigos
de que ese terrorista le puso bombas a la embajada de España y de Colombia, eso
se comprobó, agregó.
La reacción de Estados Unidos
Por su parte,
Washington fustigó la decisión de Caracas. Victoria Nuland, portavoz del
Departamento de Estado declaró que Venezuela estaría enviando un mensaje
profundamente lamentable acerca de sus compromisos con los derechos humanos y
la democracia al resto del continente, si se retirara de la jurisdicción de la
CIDH. Nuland alabó la entidad interamericana y expresó su respeto por ella.
No obstante, la
posición de Estados Unidos no está exenta de contradicciones. En efecto,
contrariamente a todos los países de América Latina, Estados Unidos, así como
Canadá, siempre se ha negado a someterse a la jurisdicción de la CIDH y no
reconoce su autoridad pues estima que viola su soberanía nacional.
Autor: Salim
Lamrani | Opera Mundi /
http://operamundi.uol.com.br/conteudo/opiniao/23694/as+razoes+da+venezuela+em+deixar+a+cidh+.shtml